domingo, 10 de enero de 2016

Enero de 2016

Otra vez vuelvo a estar a un paso de los seis meses sin publicar nada... Hoy, día 10 de enero, hace exactamente cinco años que empecé con una nueva aventura bloguera. Con ésta hacen un total de 137 entradas; debería arrojar un promedio de algo más de 27 entradas anuales, pero lo cierto es que el número de artículos ha ido menguando año a año como mi ánimo por seguir escribiendo. En los últimos tiempos el blog se ha convertido en una mera sucesión de acontecimientos personales que en realidad no interesan a mucha gente. Antes encontraba la chispa para escribir algo personal, de nula trascendencia pero gracioso. Me gustaba empantanarme y opinar sobre determinados temas de actualidad y enzarzarme en debates (hasta cierto punto estériles) con mis escasos (y casi todos amigos) lectores... Con la que tenemos liada en el panorama nacional e internacional y yo no soy capaz de escribir nada digno de mi habitual ingenio y mordacidad... ¿¡Qué demonios me está pasando!? 

Bueno, la respuesta a esa última pregunta la conozco (más o menos): tengo otras guerras abiertas. Por ejemplo, desde hace algunos años suelo dedicar bastante tiempo a clasificar y organizar nuestras fotos familiares. Como soy una persona bastante meticulosa (y obsesiva por momentos) esto supone un considerable trabajo. Cuando las cámaras digitales llegaron a nuestras vidas la tarea de revisar y clasificar cientos fotos se tornó ardua; desde la aparición de los móviles y sus decentes cámaras la cosa se ha convertido en un puñetero infierno... Aquí se alinean un par de factores que merman considerablemente mi tiempo libre disponible: Primero, paradójicamente, como informático, no confío demasiado en esta era digital. Me resisto a tener todos mis recuerdos almacenados en forma de 0's y 1's, por mucho que los tenga quintuplicados en diferentes soportes. El hecho es que se me han jodido más CDs, DVDs y HDs que libros, y me gustaría dejar a mi hija un legado tangible de lo que fuimos. Así pues, tras ordenar y clasificar (y borrar alguna que otra aberración fotográfica), desde hace ya bastante tiempo maqueto uno o más libros -convenientemente comentados- con cientos de instantáneas sobre nuestras vivencias cada año. Segundo, la realización de estos libros tiene un efecto colateral: ni yo soy un buen fotógrafo ni las cámaras de los móviles son suficientemente buenas, así que un buen número de las fotos preseleccionadas para formar parte del imaginario familiar todavía necesitan algunos ajustes en Photoshop, con el tiempo adicional que ello supone...

Otra de las razones por las que sup3ia está bastante parado es que no es el único sitio donde escribo. A veces publico alguna entrada (también menos de lo que quisiera) en otro blog que puse en marcha con algunos compañeros del gremio, ALT+F13, más orientado a nuestra profesión. Además tengo otro proyecto secreto en forma de blog que mantengo un poco más al día; pero es para una personita muy especial y no será revelado hasta dentro de unos cuantos años (si es que todavía seguimos aquí). 

A esto habría que sumarle unos cuantos entretenimientos más. Obviando las casi diez horas que paso fuera de casa por el trabajo, procuro mantenerme bastante ocupado: intento hacer cursos online ocasionalmente o conseguir formación alternativa de alguna otra forma. Este trabajo se acabará antes o después y el mercado laboral me estará esperando con las fauces abiertas para masticarme y luego escupirme. El año que acabamos de dejar atrás también me he convertido en profe de Aikido, lo que me requiere todavía un poco más de dedicación a esta actividad (aunque lo hago encantado)... Y bueno, todavía hay algunas cosas más...

En este escenario sup3ia está un poco relegado en mi lista de prioridades, así que ahora mismo estoy en ese impasse de no saber muy bien que hacer: ¿Doy por terminado este episodio de mi vida virtual o lo dejo seguir corriendo (o más bien reptando cual caracol)?... La verdad es que imagino que a Google no le estorbará demasiado este blog desactualizado en sus servidores, así que por el momento lo dejaré estar. Hoy simplemente me apetecía escribir un poco, y así, si alguno de los habituales se pasa, podrá pensar "¡O'tia, que Fran ha escrito algo!", y darme una palmadita -virtual- en la espalda..., o una colleja -también virtual-... Mañana (o dentro de seis meses) dios dirá...

6 comentarios:

  1. Hola Fran, te entiendo. Cada vez cuesta más, y cada vez hay más cosas que hacer. Y se va dejando. Yo intento seguir, pero me voy dejando cosas en el tintero, muchas, muchísimas, aunque sea sólo personales. Tengo un post a medias de mis vacaciones desde septiembre. Lo malo es que no pretendo contarle mi vida a los demás, simplemente dejarla escrita, ser un "repositorio" donde encuentras esa foto de ese día de tu hijo vestido de chulapo, o de cómo te sentías antes de un nuevo trabajo. Parte de ese trabajo tú lo haces ya con los álbumes de fotos, yo tengo un guirigay entre el datawarehouse de casa (un disco duro de un tera que cualquier día casca), el blog y ahora, picassa, que se encarga él solito de subir las fotos, clasificarlas y guardarlas (aberraciones incluidas).

    Los blogs personales están muertos, basta con que mires a la derecha del tuyo la lista de blogs que sigues. Hace diez años era lo que había, ahora tenemos el facebook, instagram, o lo que vaya surgiendo. Una foto, un comentario rápido, y los likes o no. Escribir un blog requiere mucho más trabajo, y a nadie le apetece trabajar cuando puede no hacerlo.

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  2. Soy consciente de que esto de los blogs personales está sufriendo una muerte agónica (no así los especializados), lo cual es una pena, porque me parece un medio de expresión fantástico. En mi caso, con este y otros blogs, nunca he pretendido contarle mi vida a los demás (no creo que le interese a mucha gente, salvo a unos pocos allegados y amigos que están lejos). Lo que me gustaba era encontrar una forma concreta de contar las cosas (sólo las que quiero) y expresar determinadas opiniones; y a falta de otra cosa mejor pues tiro de mi vida, mis anécdotas y mis vivencias.

    Como bien dices gran parte de lo que quiero que trascienda (entiéndase las trascendencia en el ámbito más puramente doméstico...) ya lo logro con mis foto-libros (aunque me requiera aún más esfuerzo que escribir con regularidad en un blog). Sin embargo me gusta mucho escribir (a veces, tu lo sabes, si no se me ocurre sobre que escribir, me invento un pequeño relato), por eso no me hago a esa forma de expresarse en un tuit (ni siquiera tengo cuenta) o un mensaje de Facebook (tengo una cuenta infra-infrautilizada). Me parecen formas de expresión bastante limitadas y en cierto modo desprovistas de alma, precisamente por esa faceta facilona de poner una frase mal escrita o pinchar en una manita con el pulgar hacia arriba. No digo que todo sea así en Facebook o Twiter, pero si muchísimo; tanto que, para mi gusto, los contenidos estúpidos o irrelevantes generan más ruido del que me apetece aguantar... Prefiero leer un post bien escrito que leer en un "muro" un montón de cosas poco conectadas...

    ... Y aquí es donde me doy cuenta de que ha llegado ese salto generacional que pensé que no sufriría, y me siento un poco viejuno...

    Todo esto no quita que, como dejo bastante claro en el post, en los últimos tiempos me cueste mucho más escribir que antes.

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  3. A mi lo que me ha ocurrido es que me he quedado sin ganas de contar lo que pienso y lo que me ocurre.

    Al principio un blog me parecía una idea interesante para mantener a las personas que me importan, pero que no están en mi día a día al corriente de como me va. A éso le sumaba posts de indiganción ante.. como decirlo.. el tiempo que me ah tocado vivir?

    Al ir envejeciendo, poco a poco me he vuelto apático respecto a mi entorno, me acostumbré.. y ya no me motiva a escribir. A mismo tiempo tengo la sensación de que lo que hago (en lo personal) tampoco interesa a nadie, al menos a nadie que no vea con cierta frecuencia.

    Desaparecidas las motivaciones, desaparecen los artículos.

    Por último lo que hago tecnológicamente tampoco es digno de ir a altplusf13, así que, en definitiva no hay motivo para editar contenido escrito.

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  4. Entiendo esa apatía, en lo del "envejecimiento" te llevo unos años de ventaja así que empecé un poco antes que tú -como en lo del bloggin -creo- (:P). Al final he optado por dejar un poco de lado lo de la indignación, pero no porque me haya acostumbrado (espero que no), me siguen indignando las mismas cosas -más si cabe- pero me hastía escribir sobre lo mismo de la misma manera, cuando lo que de verdad me apetecería es quemar cosas. También he asumido que ya no cuento -de momento- cosas sobre mi con la misma gracia, que era lo que igual podía gustar leer (al margen de lo poco trascendente de mi vida, este blog empezó muy bien en ese sentido...).

    Ten en cuenta que también han cambiado nuestras vidas. Nuestras responsabilidades y prioridades ya no son las que eran, y algunas de esas responsabilidades y prioridades, aunque maravillosas, desgastan bastante.

    Al final me acomodaré en este nuevo enfoque de viajes, dibujos y poco más. Algo para mi y mis amigos. Sin mayores pretensiones. No por nada, simplemente es que me gusta escribir y dibujar, y mi modesto ego me empuja a publicar alguna cosa de vez en cuando.

    En cuanto a lo de altplusf13 ¿el pivote de tablas sql te parece un logro tecnológico? El pretexto es otro, sólo es un repositorio de cosas que pueden sernos útiles o que nos llaman la atención y en las que queremos profundizar; no hay "logro tecnológico" y tampoco es una obligación (enjoy if you want)... Aunque hay que reconocer que queda bastante bien en LinkedIn (:D).

    Muchas gracias por tus comentarios. Te echaba de menos... ¡Venga ya sólo te falta poner algo en el de la Toscana :P!

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  5. Desde luego la falta de tiempo no ayuda, pero a estas alturas si puedo asegurar algo, es que cuando de verdad tienes interés en hacer algo, encuentras el tiempo.

    Luego hay cuestiones que te lo ponen más difícil o más fácil, porque aunque hay días en los que realmente no paras y el ratito de después de acostar a la enana es para cocinar para el día siguiente y/o poner lavadoras/recoger ropa siempre se intercalan con otros en los que dispones de algo de tiempo.

    Supongo que como dices uno se aburre de señalar las injusticias, aunque las siga apreciando.

    En cuanto a altplusf13 me intimida un poco el nivel de profundidad y concreción que se alcanza en muchos post y las pocas cosas que hago que podrían ir bien de informática forense o desarrollo de videojuegos me da la sensación de que no están a la altura... en fin, inseguridades de uno.

    No me des las gracias! Yo también os echo de menos y que sepas que no voy a ver el post de la Toscana que luego me da mucha envidia :D, un abrazo!

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  6. El de las "profundidades" en altplusf13 es Nenaza, no se lo tengas en cuenta (:P)... Desde luego, si sacas el tiempo y las ganas, a mi me encataría leer cosas sobre informática forense y desarrollo de videojuegos, por superficiales que fueran... Seguramente aportaría frescura y ligereza (lo que seguramente incidiría para bien en el número de lectores). Porfa no te cortes, te tenía por muchas cosas, pero "inseguro" no era una de ellas ;).

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